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domingo, 21 de abril de 2013

Nuestras creencias y el dinero


Esta palabra ya suena desgastada de tanto que la decimos y de tanto escucharla. Desde niño hemos escuchado hablar sobre el dinero sin saber que es exactamente, aunque sabemos muchas cosas de él. En algunos casos recordamos lo que nuestros padres nos decías sobre el dinero. Frases conocida que eran repetidas hasta el cansancio y fueron quedando grabadas en nuestro disco duro.

Nos decían cosas como:

"Nadie te regala nada, hay que trabajar muy duro para conseguir lo que quieres"
"El dinero no crece en los árboles"
"hay que ganarse el pan con el sudor de nuestra frente"
"El tener mucho dinero te hace ambicioso. Los ricos son personas malas"
"Soy pobre, pero honrado", pero ¿No sería mejor ser Rico y honrado? Las cosas muchas veces no son lo que parecen. Nuestras creencias sobre el dinero son muy parecidas a las creencias que tenemos sobre la religión.

Nosotros desde pequeños estamos en contacto con un tipo de creencia religiosa, que es la misma que tienen nuestros padres y conforme vamos creciendo, esta creencia crece con nosotros, porque está grabada en nuestro disco duro desde el inicio y nuestra vida gira en torno a ella. Esto es así, hasta el momento en que decidimos  preguntarnos sobre la existencia de alguna otra religión. Al descubrir que existen más religiones que la nuestra, al descubrir que existen otras creencias a parte de la nuestra, comenzamos a aprender sobre ellas y llega el momento en que podemos decidir entre seguir con la nuestra (creencia), la misma que aprendimos de nuestros padres o abuelos o cambiarla y comenzar a creer en cosas diferentes.

Nuestra creencia sobre el dinero funciona igual, podemos seguir con la misma que aprendimos desde niños o podemos decidir cambiarla. Por lo general lo que aprendemos sobre el dinero cuando niños son pensamientos negativos sobre el dinero, aprendemos que es escaso, aprendemos que es muy difícil conseguirlo, aprendemos que hay que trabajar y trabajar muy duro por él, aprendemos que las personas con mucho dinero son malas y esa es razón suficiente para  no tener dinero pues soy una buena persona.

Nada de esto es cierto, sólo que nosotros lo aceptamos como tal porque quedó grabado de manera profunda en nuestro disco duro cuando éramos muy pequeños. Es hora de formatear la computadora y hacer que se graben nuevos programas, es hora de grabar pensamientos de abundancia, es hora de comenzar a pensar que el dinero es bueno, que es bueno tener mucho dinero, que es bueno no tener que trabajar mucho por el dinero, que es mejor ser rico y honrado, a ser pobre e infeliz.

El dinero es simplemente un instrumento que nos ayuda a acercarnos más a lo que deseamos para nuestra felicidad. 

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